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Definición - El ikigai es un término japonés que significa "razón de ser", si bien no existe una traducción directa. Básicamente, hace referencia a encontrar la felicidad a través de varios propósitos vitales.

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Los cuatro pilares - El ikigai se sustenta sobre cuatro pilares: lo que nos gusta, lo que se nos da bien, lo que el mundo necesita y aquello por lo que nos pueden pagar.

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Encuentra lo que te apasiona - Las pasiones son actividades que nos gustan y que nos hacen sentirnos vivos y motivados.

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Identifica tus talentos - Los talentos son nuestras destrezas y puntos fuertes, como ser bueno escribiendo o con las matemáticas. Identificar lo que se nos da bien ayuda a que se nos reconozca por ello.

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Entiende las necesidades del mercado - Este elemento en particular te obliga a reflexionar sobre qué puedes aportar al mundo para marcar la diferencia. Piensa en los desafíos y problemas que hay en tu vida o comunidad.

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Aspecto económico - Es importante saber qué es aquello por lo que te pueden pagar. ¿Cómo puedes monetizar tus pasiones?

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El equilibrio entre los cuatro pilares - Encontrar el equilibrio entre estos cuatro pilares puede parecer difícil, pero merece la pena. El ikigai te ayudará a vivir una vida más plena, satisfactoria y llena de propósito.

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Beneficios de encontrar tu "ikigai": mayor felicidad - Vivir en sintonía con tu ikigai implica vivir conforme a tu propósito y, por lo tanto, experimentar una mayor alegría y satisfacción.

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Menor estrés - El estrés puede ser el resultado de una desconexión o insatisfacción con la vida. Descubrir tu ikigai significa estar en sintonía con los cuatro pilares, lo que puede promover el equilibrio y la tranquilidad.

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Sensación de realización -

El ikigai puede enriquecer tu vida y la de los demás. Hacer algo que te gusta, ser bueno en ello y ayudar al mundo en el proceso puede hacer que te sientas realizado.

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Mayor motivación -

Tener claro quién eres gracias al ikigai suele ser una hélice que te impulsa hacia delante incluso en los momentos más difíciles.

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Mejor salud -

Los estudios demuestran que tener un propósito en la vida refuerza las defensas, reduce la ansiedad y aumenta la esperanza de vida.

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Crecimiento personal - Conocernos mejor a nosotros mismos nos ayuda a crecer como personas. El ikigai nos invita a explorar nuevos intereses y a ampliar nuestros horizontes.

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Cómo encontrar tu "ikigai": practica la conciencia plena - La conciencia plena te da tiempo y espacio para estar presente y labrar una conexión más profunda con tu yo interior.

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Reflexiona acerca del diagrama - Una práctica útil es pensar en los cuatro pilares del ikigai y dedicar tres minutos de escritura a cada uno de ellos. Asegúrate de reflexionar acerca de lo aprendes a medida que vas escribiendo.

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Medita - La meditación puede ser una herramienta muy útil de cara al ikigai, ya que su objetivo es calmar la mente, reducir el estrés y ayudarte a pensar con claridad.

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Prueba y observa - ¡Prueba cosas nuevas! Experimenta con actividades diferentes y presta atención a cuáles te hacen más feliz o te ayudan a sentirte realizado.

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Pide opinión -

Saca tiempo para hablar con gente de confianza. Buscarte un mentor o charlar con un amigo puede ayudarte a alinear los cuatro pilares de tu ikigai.

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Sé paciente y persistente - Sé paciente contigo mismo, ya que el ikigai requiere tiempo. Se trata de un viaje de autodescubrimiento, por lo que se asemeja más a un maratón que a un esprint.

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Autorreflexiona - Dedica tiempo a autorreflexionar. Piensa en todo lo que has aprendido y en cómo te sientes en esta etapa del proceso. Lleva un diario para poder echar la vista atrás y así tener más claro tu rumbo en el futuro.

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Pasos prácticos para incorporar el "ikigai" a tu vida - Incorporar el ikigai a tu vida cotidiana es tan fácil como sacar tiempo para dedicarte a las actividades que te hacen feliz.

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Beneficios para la salud física -

El ikigai puede influir positivamente en tu salud física, ya que te anima a llevar un estilo de vida más activo. Al hacer cosas que te gustan y explorar otras posibilidades, puedes desarrollar hábitos más saludables que mejoren tu calidad de vida.

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Equilibrio entre la vida laboral y personal -

El objetivo del ikigai es ayudarte a compaginar tu vida personal y laboral de forma saludable, sintonizando tu trayectoria laboral con tus valores y pasiones. En última instancia, puede hacer que te sientas más satisfecho con tu trabajo.

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Desafíos - Al igual que con cualquier otro cambio, el ikigai también presenta una serie de desafíos, como la falta de autoestima, la poca claridad y la presión social.

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El "ikigai" en las relaciones -

El ikigai puede ayudar a reforzar las relaciones. Compartir intereses, respaldar los objetivos del otro y fomentar el crecimiento y felicidad mutuos hace que los vínculos se vuelvan más fuertes.

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Perspectivas culturales -

La perspectiva que ofrece el ikigai también está condicionada por los diferentes lugares y sus respectivas culturas. En Occidente, por ejemplo, se hace más hincapié en la realización laboral, mientras que en Oriente se le concede más importancia al desarrollo comunitario.

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Una cuestión de tiempo -

Tu ikigai crecerá y se transformará con el tiempo al igual que tú. Es importante que lleves a cabo un mantenimiento regular para reevaluar la situación en la que te encuentras y saber qué es lo que quieres y necesitas de la vida.

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Un cambio de mentalidad -

Muéstrate abierto a la posibilidad de cambiar de mentalidad para poder aprovechar el ikigai al máximo. Aunque reflexionar tanto sobre ti mismo te haga sentirte vulnerable al principio, al final te reportará un gran beneficio.

Fuentes: (Calm) (Marlee)

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