Una siesta corta es un descanso breve y planeado que puede aliviar el cansancio y mejorar el estado general de alerta.
Echarse siestas cortas tiene muchos beneficios, entre ellos reducir la fatiga y mejorar la memoria, el estado de ánimo e incluso la salud cardiovascular.
Según una investigación, las siestas de entre 10 y 30 minutos ayudan a mejorar el estado de alerta. Sin embargo, lo ideal es dormir menos de 20 minutos para así reducir el adormecimiento.
El mejor momento para echarse la siesta es entre ocho y nueve horas después de despertarse por la mañana.
A poder ser, lo ideal es echarse la siesta en una cama fresca y cómoda y en un cuarto a oscuras en el que no haya ruido.
También puedes recurrir a la ayuda de antifaces, tapones para los oídos y aplicaciones de descanso.
Simular la sensación de que es de noche puede ayudar a alcanzar un estado de relajación y a conciliar el sueño con más facilidad que si hay luz.
Antes de echarte la siesta, asegúrate de que el cuarto esté fresco, pon los dispositivos electrónicos en silencio, corre las cortinas (o usa un antifaz) y ponte tapones para los oídos.
También puedes mentalizarte para echarte una siesta evitando el estrés antes de tumbarte, pensando en cosas que te transmitan calma y practicando la conciencia plena.
Las fragancias como la lavanda, el cedro y la bergamota fomentan la relajación y mejoran la calidad del descanso.
Las siestas cortas pueden ser especialmente útiles para quienes trabajar por turnos, ya que mejoran el estado de alerta y la sensación de rejuvenecimiento.
Si te has echado la siesta correctamente, deberías despertarte renovado y con energía. Puede que tardes unos pocos minutos en despejarte del todo, pero luego te sentirás mejor.
Moverte y hacer estiramientos ligeros antes de echarte la siesta puede ayudarte a relajar el cuerpo. La clave está en no subir demasiado las pulsaciones.
Mientras no te eches la siesta más allá de las 17:00, descansar brevemente durante el día no debería perjudicarte cuando te vayas a la cama.
¡No es cierto! Meditar o tumbarte en silencio durante un breve periodo de tiempo sigue siendo mejor que estar despierto cuando necesitas descansar.
Echarse la siesta puede ser algo extremadamente saludable, ya que nos ayuda a resetear y a afrontar el resto del día con energía.
Fuentes: (Sleep Foundation) (Casper) (LinkedIn) (Today) (Verywell Health) (Healthify) (CDC) (Naturepedic) (Bearaby) (MIT News) (NIH) (Business Insider)
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ESTILO DE VIDA Sueño
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